domingo, diciembre 7Hola Provincia

dejó su huella en Lanús y en Lomas


Nacido en Lanús en 1956, Russo dejó una huella profunda tanto como jugador —fue símbolo de Estudiantes de La Plata— como entrenador, donde alcanzó más de mil partidos dirigidos y una docena de títulos en distintos clubes de Argentina y el exterior.

image

Aunque su carrera lo llevó por todo el continente, Russo siempre mantuvo un fuerte vínculo con el sur del Conurbano bonaerense. Creció en Lanús, club del que fue hincha y con el que consiguió un ascenso como técnico, y vivió durante años en Lomas de Zamora.

La relación de Russo con Lomas

De acuerdo con una entrevista publicada por La Unión, el entrenador residió en el distrito durante las décadas del 80 y 90, en las calles Larrea y luego Colombres, a pocas cuadras de la avenida Hipólito Yrigoyen. Uno de los lugares que más frecuentaba Russo era el tradicional Café París, ubicado en España y Gorriti, en pleno centro de Lomas. Allí celebró algunos de los momentos más importantes de su carrera.

“Llegamos de Porto Alegre a la madrugada, tras ganarle a Gremio la final, y esa misma tarde fui a Café París”, contó, recordando el título de la Copa Libertadores 2007 que obtuvo con Boca.

image

“En Café París encuentro un espacio de tranquilidad. Por más que la gente pase, ahí me protegen y me cuidan: hay muchísimas cosas que mis amigos hacen por mí”, agregó. El DT solía ir al bar cada dos o tres meses, siempre que estaba en Lomas. “Voy allí a tomar un café puro porque me siento muy cómodo”, dijo en esa misma entrevista.

Una vida dedicada al fútbol

Russo dirigió equipos en Argentina, España, Chile, México, Colombia, Perú, Paraguay y Arabia Saudita. Fue campeón con clubes como Vélez Sarsfield, Rosario Central y Millonarios de Colombia. En Boca tuvo tres ciclos, incluyendo la recordada conquista de la Libertadores 2007 junto a Juan Román Riquelme y el regreso al club en 2019, donde ganó la Superliga 19/20 y la Copa Maradona.

El fútbol argentino despide a un referente. Con 12 títulos y más de mil partidos como entrenador, Miguel Ángel Russo deja una huella profunda en los clubes que dirigió y en los hinchas que lo admiraron. En Lomas, muchos vecinos lo recordarán también como aquel hombre amable que tomaba café en la esquina de España y Gorriti, donde siempre se lo recibía con afecto.

Leé también: Los chicos del Club Atlético Monte Grande buscan apoyo para jugar de local en básquet





Source link

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *